La idea de escribir esta novela nace de mis experiencias como peregrino caminante en 1999, 2000, 2001 y 2002. De lo que vi y viví en aquellos años queda el Camino en sí, todo lo largo y fatigoso que es, metro a metro, kilómetro a kilómetro, con sus pueblos, ciudades, iglesias, catedrales, historia, ríos, montañas, gastronomía, religiosidad, calor veraniego, lluvias… y una trama en la que aparecen desde delincuentes madrileños de baja estofa hasta narcotraficantes gallegos, pasando por policías, guardias civiles, hospitaleros, peregrinos, «bicigrinos», beatas, guiris, aldeanos, enamorados, desenamorados, iluminados… Todos mezclados en un thriller que les va a hacer sonreír, reír e incluso emocionarse un poquito. ¡Que lo disfruten!